
"El fútbol está lleno de sorpresas", alerta Maresca antes de chocar con Espérance

El entrenador del Chelsea, Enzo Maresca, alertó este lunes sobre la fortaleza del Espérance, el equipo tunecino al que los Blues enfrentarán el martes en Filadelfia en un juego a vida o muerte en el Mundial de Clubes.
El cuadro londinense (3 puntos) necesita sumar para unirse al Flamengo (6) como los dos representantes del Grupo D en octavos de final, mientras que los africanos (3) necesitan vencer para instalarse en la siguiente ronda.
En un partido en simultáneo en Orlando, los brasileños buscarán empatar o vencer ante el eliminado Los Angeles FC (0) para asegurar la punta en la tercera y última fecha de la llave.
"Seguro que va a ser un partido difícil", dijo el entrenador italiano en una rueda de prensa en Filadelfia, respecto al adversario del martes, el equipo más laureado de Túnez y cuatro veces vencedor de la Liga de Campeones de África.
"Contra el Flamengo (derrota 2-0) estuvieron en el partido hasta el final. Contra Los Ángeles ganaron (1-0) e hicieron un buen partido", advirtió.
De quedarse con el segundo boleto del Grupo D, el Chelsea podría enfrentar en octavos al vencedor de la zona C, que podría ser el Bayern de Múnich.
"Si pasamos podremos hablar del Bayern", afirmó Maresca. "En este momento hay que hablar de mañana. El fútbol está lleno de sorpresas".
El timonel de los Blues no descartó hacer nuevas modificaciones tácticas, a pesar de que sus aparentes ensayos ante el Flamengo, que los venció sorpresivamente 3-1, no fueron exitosos.
"Si es un buen momento o no para probar cosas nuevas, no lo sé. Pero también estamos aquí para pensar en el futuro y probar diferentes sistemas", sostuvo.
Aunque el encuentro ante Espérance se disputará a las 21H00 locales, Filadelfia sufre una ola de calor que ha dificultado al Chelsea los preparativos del cotejo.
"Es casi imposible entrenar por culpa del tiempo. Ahora solo tratamos de ahorrar energía para el partido", declaró el DT, que probablemente hará rotaciones en su plantilla.
Maresca también descartó que los directivos del equipo lo hayan presionado a él o a los jugadores para ganar el Mundial como consecuencia de los enormes incentivos económicos que se ofrecen en el nuevo torneo de la FIFA.
El organismo rector del fútbol mundial repartirá 1.000 millones de dólares en premios a los 32 clubes que compiten en Estados Unidos.
Si el Chelsea, uno de los 12 representantes europeos, alza el trofeo el 13 de julio, podrá llevarse a casa unos 125 millones de dólares.
Eso podría dar a la escuadra de Stamford Bridge una ventaja considerable sobre muchos de sus rivales ingleses y europeos de cara a la próxima temporada.
"Nunca me presionan a mí ni a los jugadores en el sentido de que tenemos que ganar este torneo por el dinero", señaló.
W.Richard--SMC